CARLOS RODRÍGUEZ LÓPEZ
No sé si habrá un gallego en la luna, de lo que damos fe es de que hubo uno en el Arsenal de ‘Los Invencibles’, uno de los equipos más cercanos a la perfección que ha visto el fútbol moderno.
Francis Cagigao (Londres, 1969) es hoy un hombre tranquilo esperando una nueva aventura desde su casa en Monforte de Lemos (Lugo). Ni una carrera como futbolista de élite, ni más de 20 años siendo pieza clave en la secretaría técnica del Arsenal parecen haber saciado su hambre de fútbol.
Pregunta: Tu aventura en el Arsenal comienza como futbolista. ¿Cómo se produce tu fichaje?
Respuesta: Siempre jugué al fútbol en Londres, donde nací y me crie. Con 15 años estaba jugando en tres equipos: el escolar, el de mi padre -un equipo de los domingos, el Deportivo Galicia- y otro equipo inglés. Firmo con el equipo juvenil del Arsenal con 16 años, siendo en ese momento jugador de un equipo de fútbol semiprofesional que se llama Wembley FC.
P: Aunque en aquella época eras aficionado del Chelsea…
R: Sí. Mi padre, mi hermano y yo vivíamos a 3km de Stamford Bridge e íbamos todos los fines de semana. Curiosamente, el primer partido que presencié fue un Chelsea-Arsenal que acabó empate a cero, cuando tenía 4 años.
P: Tras colgar las botas vuelves al Arsenal como ojeador. ¿Cómo recuerdas tu contratación? ¿Te lo ofreció directamente Wenger?
R: Por entonces yo ya estaba sacando mis títulos de entrenador en la Federación Inglesa y mis títulos de UEFA. En ese momento todavía jugaba en el Lemos y entrenaba en juveniles al Calasancio, aquí en Monforte, cuando me ofrecieron el trabajo como ojeador. Esto se produce en la ciudad deportiva del Arsenal porque estaba haciendo mis prácticas de titulación de UEFA A en el Arsenal sub- 16.
Fue directamente Arséne quien me habló para abrir un nuevo departamento de scouting global. Estaba muy interesados en que una persona como yo, que había sido jugador de la casa y hablaba varios idiomas (portugués debido a mi gallego, castellano e inglés) integrara ese equipo de scouting. En ese momento solo hizo falta un acuerdo entre Lemos y Arsenal para que yo pudiera perder algún entrenamiento para desarrollar mis tareas.
Ya no trabajo en el club, pero no cambiaría la plantilla del Arsenal por la del Liverpool ahora mismo
P: ¿Siempre has desempeñado las mismas funciones en el club?
R: No. Empecé como scout en España y Portugal y jefe responsable de ambos países. Después fui jefe de captación en todo el sur de Europa. Más tarde compaginé ese trabajo con el de asesor de rivales de la Champions League, durante siete años —incluyendo aquel en el que llegamos a la final—. Luego pasé a jefe de captación de Sudamérica y sur de Europa y, por último, fui jefe de global scouting, es decir, de todo el departamento de ojeadores. Además, en tres etapas de transición en el club fui jefe de reclutamiento de forma interina, algo así como la combinación de secretario técnico y director deportivo.
P: Diferentes puestos, cada uno con sus peculiaridades pero, ¿cuáles eran las líneas comunes?
R: Si bien hay muchas tareas, la clave es la identificación, captación y reclutamiento de futbolistas, tanto de jóvenes talentos como futbolistas para el primer equipo. Esas eran las tareas primordiales. La recomendación no es solo del talento del futbolista, es también conocer la situación del mercado, saber si tiene posibilidad de reventa en el futuro… Luego la parte puramente económica es para el equipo financiero del club, mi función paraba en la pre-negociación.
P: ¿Cuáles son tus planes de futuro?
R: Escuchar, estoy escuchando varias propuestas. No me quiero encasillar en nada. Ahora toca ver todas las opciones y, cuando sea el momento adecuado, mi intención es volver a un gran proyecto.
P: Llegaste a recibir ofertas de otros grandes de Europa cuando estabas en el Arsenal. ¿Qué te hacía estar tan cómodo en Londres?
R: Principalmente el trabajar con alguien como Arséne y ser una persona a la que el club valoró siempre muy bien. El Arsenal me valoraba mucho, me respetaba y me escuchaba. Por lo menos en 23 de esos 24 años estuve muy cómodo trabajando con la gente del club, así que no vi necesidad de buscar otros proyectos.
El modelo es bueno dependiendo de las personas que trabajan y nunca al revés. Lo importante son las personas y no necesariamente el modelo
P: En los últimos años, clubes como el Real Madrid han variado su planificación deportiva priorizando la contratación de jóvenes talentos. Un modelo cada vez más extendido entre los grandes de Europa del que el Arsenal fue pionero. ¿Habría sido posible convencer a Real Madrid o Barcelona a finales de los 90 de que existía un modelo más arriesgado, pero a la larga más rentable?
R: No lo sé. Todos los modelos pueden ser válidos. Tienes que identificar y separar la contratación de jóvenes valores, lo que suelo llamar development players o jugadores de progresión, de jugadores ya contrastados o necesarios para tu primer equipo. Por un lado buscas el resultado inmediato y, por otro, el potencial y el futuro resultado deportivo o económico, que también es muy importante.
No puedo hablar de lo que han hecho otros clubes porque estaba muy centrado en el mío, lo que sí tengo muy claro es que un club tiene que buscar las dos cosas: futbolistas que te ayuden en el corto plazo y jóvenes talentos para el futuro que ayuden a crecer el patrimonio de un club. Yo creo que, hoy en día, un club, grande o pequeño, tiene que buscar ambas cosas.
P: ¿Se prioriza la formación de un canterano como futurible activo de venta antes que como jugador para la primera plantilla?
R: Es muy difícil generalizar, en el fútbol no se debe generalizar nunca. Cada club es distinto, no hay un solo club que tenga la misma filosofía que otro. Hay clubes donde obviamente priorizan sacar adelante futbolistas de su cantera o futbolistas fichados muy jovencitos de otros clubes. Nosotros hicimos esto muchísimas veces y nos ayudó a costear el nuevo estadio, cómo no. Pero hay otros clubes que van a anteponer el poder vender jóvenes talentos a clubes que van a intentar que triunfen en el primer equipo.
En el caso de un Barcelona o Madrid, por dar un ejemplo en España, a lo mejor no tienen esa necesidad imperiosa de vender un joven, con lo cual lo que buscan es que triunfe en el primer equipo. A lo mejor en el caso de otros más modestos puede haber una política en la que entren ambas cosas. Creo que depende de la economía y de la filosofía de cada club.
P: Te voy a pedir que te mojes. ¿Cuál dirías que es el club europeo que mejor trabaja la cantera?
R: No es cuestión de mojarse. Para decirte qué club trabaja mejor la cantera habría que visitar uno a uno y hacer un estudio tras dos o tres meses observando cada cantera. Cualquier cosa que yo diga va a ser muy subjetiva, así que prefiero ir a cosas objetivas o, al menos, lo más objetivas posibles.
Yo diría que hay muchos clubes que han trabajado las canteras bien, pero también te puedo decir que, si hablamos de tendencia actual, quizás la Premier sea la liga que mejor ha trabajado con jóvenes en los últimos ocho o nueve años. Ha habido una grandísima inversión económica en las escuelas inglesas y estamos viendo ahora mismo que están llegando muchísimos jugadores ingleses muy talentosos. La selección inglesa se está beneficiando e incluso muchos grandes clubes europeos están intentando firmarlos, algo nada fácil porque los clubes Premier tienen muchos recursos económicos.
P: Aunque ha habido años de travesía en el desierto de los jugadores ingleses, alimentada por esa leyenda de que no se adaptan bien a otras ligas…
R: Sí. Pero bueno, esas teorías hace tiempo que no existen. Inglaterra sufrió durante muchos años por estar fuera de Europa, por ser un país con unas tradiciones y una cultura del fútbol muy arraigada, muy suya, muy insular en el pensamiento —lo estamos viendo hoy en día en la política—.
En los últimos años la inversión en fútbol base y la cultura de las academias inglesas de mirar hacia fuera, de buscar lo mejor de cada lugar, de investigar qué estaba pasando en otros países como España o Alemania, ha hecho que para mí sean los que mejor han trabajado con la base en estos últimos años. Antes de eso está claro que España y Alemania trabajaron de manera brillante durante muchos años.
P: Volviendo al Arsenal, ¿con qué te quedarías de cada uno de los entrenadores del primer equipo con los que has coincidido?
R: De Arsène poco se puede decir, es una leyenda del club, se vivió un antes y un después con él. Convirtió al Arsenal en un brand global, como se suele decir, ya no solo un club mítico del Reino Unido. Creo que se jugó un fútbol brillante, fue el entrenador más exitoso en lo que se refiere a títulos de la historia del club. El mero hecho de estar peleando siempre y jugar durante 21 años seguidos la Champions League lo dice todo.
Después tuvimos unos años de transición con Unai Emery, otro muy buen entrenador. Quizás tuvo algo de mala fortuna y los resultados no fueron los adecuados en su segunda temporada, pero también tenemos que recordar que llegamos a la final de la Europa League y que en liga quedamos a un punto de entrar en Champions. Creo que hizo un buen trabajo y simplemente la fortuna no le acompañó.
Desde entonces tuvimos, desde mitad de temporada y hasta la actualidad, a Mikel Arteta. Pienso que es un entrenador con un gran potencial, que ha tenido al lado a la persona idónea para formarse, Pep Guardiola, uno de los mejores entrenadores del fútbol. Y además es un hombre que conoce al Arsenal y sus valores al haber sido jugador y capitán del primer equipo. Pienso que es el entrenador idóneo, que ha hecho las cosas muy bien y se ha reclutado muy bien. Aubameyang, Martinelli, Pépé, Willian… no hay muchos clubes a nivel mundial que puedan generar tanto arriba. Pienso que ahora tienen una plantilla muy equilibrada. Ya no trabajo en el club, pero no cambiaría la plantilla del Arsenal por la del Liverpool ahora mismo.
P: Palabras mayores con el hype que está generando el Liverpool en los últimos años…
R: El Arsenal es el tercer o cuarto presupuesto de la Premier y creo que estos últimos años se ha fichado bien. Hay una base muy muy fuerte, creo que sería decepcionante que el club no acabase en Champions esta temporada y que hay mimbres para algo más. Obviamente, el Liverpool es un equipo consolidado con un grandísimo entrenador, pero ahora mismo no veo una plantilla tan fuerte como la del Arsenal en toda la liga. Creo que la distancias en la Premier por arriba se han reducido muchísimo y hay tres o cuatro equipos que a mi entender pueden ganar el campeonato, entre ellos el Arsenal.
No existe la operación fácil en el fútbol
P: ¿Puede Arteta reencarnar ese modelo de manager tan propio del fútbol inglés que ha ido desapareciendo en los últimos años?
R: Al final, el modelo depende un poco del club y las personas que haya. Hay políticas prestablecidas y lo que vale para uno no tiene porqué valer para otro. Lo que está claro es que no volveremos a ver situaciones como las de Arsène o Alex Ferguson, entrenadores tan volcados de principio a fin en la planificación de un club. Eso es muy difícil de volver a ver.
Si es verdad que Mikel entró como head coach y ahora es manager. El club tiene un director deportivo, pero él es manager, con lo cual va a tener mucho que ver en la planificación deportiva. El modelo es bueno dependiendo de las personas que trabajan y nunca al revés. Lo importante son las personas y no necesariamente el modelo.
P: ¿Un fichaje que se le haya resistido a Francis Cagigao?
R: Prefiero hablar de hechos, porque hay muchos. Todas las temporadas se te escapaban de uno a cinco jugadores que hayas recomendado, por un motivo o por otro. A veces por economía y otras por otros factores. Obviamente, de dominio público desde hace muchos años son los de Leo Messi y Gerard Piqué el año que fichamos a Cesc, que estuvimos muy cerquita. Hubo un momento en el que parecía una realidad y eso podría haber sido un antes y un después para el club.
P: ¿La contratación que más ha costado cerrar?
R: Todas. Una parte es la identificación del futbolista, después viene la recomendación y la captación, antes de que puedas estar seguro de reclutar. Es un proceso muy largo en el que están involucradas muchas personas, no solo scouting y reclutamiento, hay un momento en el que pasa a ser también un trabajo del equipo de football operations. En ninguna ocasión es fácil, no existe la operación fácil en el fútbol.
P: ¿Alguna que recuerdes con especial cariño?
R: Una de las situaciones que más emoción me ha dado ha sido la de Emi Martínez. Lo vi en Chile con la selección argentina sub-17 en 2009, lo firmamos en 2010 y hasta hace poco no tuvo muchas oportunidades. El año pasado fue determinante para nosotros y este año lo han vendido por veintitantos millones. Su caso sí me ha producido algo más de emoción por lo que le ha costado llegar y demostrar su valía y porque era un jugador en el que confiaba mucho. Cualquier futbolista que después de llegar al club tan joven acabe llegando al primer equipo, y después haya dejado mucho dinero, como pueden ser Fábregas, Van Persie o Carlos Vela, pues obviamente producen satisfacción.
P: ¿Cuál ha sido tu momento más feliz en el Arsenal?
R: Me quedo con el viaje entero. Puedo decir, con cierta comedia, que de los 24 años en los que estuve me quedo con los primeros 23 [risas]. Pude aprender al lado de gente maravillosa, leyendas del futbol con las que tuve la fortuna de trabajar y, después, obviamente, desarrollar mi propia manera de trabajar dentro del club y poner mi granito de arena en varios aspectos. Con lo cual, me quedo con el viaje entero.